Una vez concluida la actividad de pruebas y reunidos todos los datos de las mismas, el equipo de investigación puede finalmente redactar un artículo en el que se describe la tecnología y se presentan los resultados. Confiando en que el sistema funcionará de forma consistente, deciden hacer que la tecnología sea de código abierto para garantizar que otros investigadores puedan realizar sus propias pruebas y validar los resultados. Tras esta decisión, los investigadores deciden borrar todos los datos personales de los sujetos que participaron en la actividad de investigación.